Citado por nuestra artista favorita, Carmen Roy, acudimos al paseo de la ribera partiendo desde el canal en una marcha en solitario, cubriendo los tres primeros km; en una soleada mañana
El Ebro estaba esplendoroso y muy silencioso, se oían las aves desde los islotes del centro del cauce
Invitando a seguir sus alegres gorgojeos, y por esta ruta al parque del agua, que nos recibe con toda la floración de los arboles del amor «cerezo-ciruelos»
Continuamos ruta alternativa y disfrutamos de la vista del «Pilar» desde la entrada norte de la ciudad
Seguimos hasta nuestra próxima parada en el barrio el Picarral y una vez despedidos retornamos a la archa en solitario hasta retornar al punto de partida, no sin antes pasar por los otros dos ríos
Donde damos finalizada la marcha que tras 20 km no es agotamiento lo que sentimos, si no más bien paz y plenitud, las rutas urbanas de poco transito rodado son una alternativas viables y un buen preparatorio par ala marcha de Villar de los Navarros en próximo 15 de marzo
Pero antes de retirarnos un ritual inexcusable, la teórica, que no falte
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